La fábula ‘El Náufrago y el Mar’, narra la historia de un marinero y su encuentro con el poderoso mar. Esta historia ofrece una profunda reflexión sobre la comprensión de las verdaderas causas detrás de los desafíos de la vida.
El Náufrago y el Mar: Una Fábula sobre Comprensión y Responsabilidad.
En la antigüedad, un marinero sobrevivió milagrosamente a un violento naufragio. Exhausto y agradecido, se arrastró hasta la orilla y se quedó dormido en la arena, acunado por el suave murmullo de las olas. Al despertar, sus ojos se encontraron con la vasta y serena extensión del mar. Irritado y confundido por la traición de las aguas que antes lo habían amenazado con la muerte, el náufrago se puso de pie y gritó al mar, acusándolo de engañar a los hombres con su calma engañosa y luego traicionarlos con su furia desenfrenada.
En ese momento, el mar tomó la forma de una mujer majestuosa y le respondió con una voz que reflejaba la profundidad de las aguas: «No es a mí a quien debes culpar, sino a los vientos caprichosos. Yo siempre soy así, tranquilo y sereno, pero son los vientos los que me agitan y me transforman en una fuerza incontrolable.»
Moraleja de «El Náufrago y el Mar»:
La fábula ‘El Náufrago y el Mar’ nos enseña la importancia de entender correctamente quién o qué es responsable de nuestras desgracias. Nos recuerda que debemos buscar más allá de las apariencias y reconocer las verdaderas fuerzas que actúan en nuestras vidas, evitando culpar erróneamente a los elementos que simplemente son influenciados por otros factores.