La Zorra y el Cocodrilo

«En fábula de Esopo ‘La Zorra y el Cocodrilo’, la astucia y presunción chocan a orillas de un río serpenteante. En este relato clásico, una zorra perspicaz se enfrenta al pomposo alarde de un cocodrilo sobre su linaje, llevándonos a una reflexión humorística sobre la vanidad y la verdad.»

La Zorra y el Cocodrilo: Una Fábula sobre Vanidad y Astucia.

En la ribera de un río ancho y serpenteante, una zorra astuta y un cocodrilo imponente se enfrascaron en una acalorada discusión sobre la nobleza de sus linajes. El sol brillaba fuertemente, reflejándose en las aguas tranquilas y en las escamas del cocodrilo, que parecían centellear con cada palabra que pronunciaba.

El cocodrilo, con un tono de voz lleno de pompa, habló largo y tendido sobre la grandeza y la antigüedad de sus ancestros. Se vanaglorió de sus vínculos con figuras legendarias y, henchido de orgullo, concluyó su monólogo proclamando que sus padres habían sido nada menos que los guardianes de un gimnasio famoso.

La zorra, que había escuchado pacientemente, esbozó una sonrisa astuta en su rostro. Con una voz llena de ironía, replicó: «No necesitas convencerme con palabras, amigo cocodrilo. Las cualidades de tu piel, tan áspera y curtida, ya demuestran claramente que tú y tus ancestros han pasado muchos años dedicándose a los ejercicios de gimnasia.»

El cocodrilo, sorprendido y un poco avergonzado por la observación aguda de la zorra, se quedó sin palabras. La zorra, con una mirada inteligente, dejó al cocodrilo reflexionando sobre la futilidad de exagerar o mentir sobre su pasado.

Moraleja de «La Zorra y el Cocodrilo»:

La fábula ‘La Zorra y el Cocodrilo’ de Esopo nos enseña que la presunción y el alarde sobre nuestros orígenes o logros pueden llevarnos al ridículo. La astuta respuesta de la zorra subraya la importancia de ser honestos y humildes, mostrando que a menudo es mejor ser genuino y veraz que intentar impresionar con falsas pretensiones.